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No Time To Die
Un final imperfecto pero intrigante para la era de Daniel Craig en Bond, No Time To Diesees la larga historia del elegante espía finalmente lo alcanza. El resultado es una película que va en direcciones que la franquicia nunca había tomado antes, llegando a una conclusión que es tan agridulce como adecuada.
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Además, nunca escatima en acción, comenzando desde el principio con una explosiva secuencia de acontecimientos en la que Bond casi muere en un ataque sorpresa mientras llora a un amor del pasado. A continuación, avanzamos cinco años en los que se ha retirado, contento de dejar atrás la violencia y la muerte de su vida.
Por supuesto, al tratarse de una película de Bond, se ve arrastrado de nuevo a otra misión que, de una u otra manera, será la última. Incluso con un villano poco desarrollado, la película es Craig realmente dando todo en una despedida final que envuelve todo muy bien.
The Sandlot
Una de las películas de madurez más divertidas y sinceras de todos los tiempos, «The Sandlotis» es una película de deportes tan tonta como dulce. Se centra en el personaje de Scotty Smalls, interpretado por Tom Guiry, un chico entrañablemente tonto y solitario que se ha mudado a un nuevo lugar donde no conoce a nadie.
Justo cuando parece que no va a tener ningún amigo durante el verano, conoce al carismático Benny «El Chorro» Rodríguez, de Mike Vitar, que le presenta a un grupo de chicos que van a jugar al béisbol todos los días. Es allí donde Smalls, como le llaman los otros niños, encuentra tanto la amistad como un montón de travesuras cuando una valiosa pelota de béisbol es accidentalmente golpeada sobre una valla que contiene una bestia a la que nadie se atreve a enfrentarse.
Con un guión ajustado y muy divertido, captura un retrato de la juventud que es sentimental sin ser superficial. Es una película que vive en los detalles, capturando lo que significa crecer con tanta precisión como amor por todo lo que la adolescencia tiene que ofrecer.
El lobo de Wall Street
El lobo de Wall Street, un retrato brillantemente excesivo e interminablemente desorbitado de la riqueza, es una obra de arte desternillante de Martin Scorsese en su versión más desenfrenada. Protagonizada por Leonardo DiCaprio en el papel del insensible Jordan Belfort en la vida real, muestra cómo es capaz de hacer cualquier cosa para llegar a la cima.
Junto a él, los igualmente extraordinarios Jonah Hill y Margot Robbie roban todas las escenas de esta alocada película. La película narra la caída de Belfort, que pasa de ser un corredor de bolsa asquerosamente rico a un ladrón corrupto que se enriqueció a costa de los demás.
También es oscuramente hilarante, dejando que las escenas de incompetencia drogada se desarrollen en todo su esplendor. Sin embargo, para cuando cae el zapato, la risa se ha desvanecido y se ha convertido en silencio. En su lugar, vemos a un hombre y al sistema en general revelados en toda su rotura. La excentricidad es un entretenimiento, y el colapso que se avecina, un temor.
Látigo
Una película que permanece siempre dormida por todo su ingenio y encanto, Whip It ve a Drew Barrymore dirigir con confianza una comedia-drama que toca todas las notas correctas. Está protagonizada por Elliot Page como Bliss Cavendar, una inadaptada que vive en un pequeño pueblo de Texas y que se une en secreto a un equipo de roller derby para escapar del aplastante conformismo de una madre controladora y del mundo de los concursos de belleza.
El mundo del roller derby aporta libertad y un nuevo sentido a Bliss, aunque no puede durar para siempre, ya que tendrá que elegir entre estos dos mundos tan diferentes. Es una película que no reinventa la rueda, sino que la hace avanzar a toda velocidad, con una sensación de alegría mezclada con melancolía en las luchas de su personaje central por encontrar un camino hacia adelante.
Page capta esta vulnerabilidad y esta visión con facilidad, creando una experiencia que encuentra una tierna pasión en la vida de sus desvalidos que se han labrado un mundo por sí mismos.